Dr. Miguel Ángel Martínez-García en nombre del Comité de Editores
Editor Jefe de Archivos de Bronconeumología

La actual Junta de Editores de Archivos de Bronconeumología y Open Respiratory Archives está ya inmersa en su tercer año al frente de las revistas. Unos años de crecimiento científico y bibliométrico en un ambiente realmente hostil: una pandemia que obligó a replantearse muchas cosas, no solo desde el punto de vista asistencial sino también científico y editorial, así como una serie de desgraciados sucesos con nuestra editora Elsevier, que gracias al esfuerzo y buena voluntad de todos han podido sacarse adelante.

Desde nuestros comienzos, nuestra política ha sido clara: internacionalizar la revista para incrementar su visibilidad, no ser COVID-dependiente para evitar vaivenes editoriales inesperados (como ha podido observarse en muchas revistas) apoyando más un crecimiento progresivo y finalmente, dar cabida al mayor número de nvestigadores posibles con especial énfasis en aquellos grupos o personas punteros en sus disciplinas, en los grupos emergentes y en mayor participación de la mujer investigadora. Todo ello, por supuesto, siempre bajo la premisa de la calidad científica como condición indispensable.

Con este programa, nuestra idea era llevar a Archivos de Bronconeumología a ser una revista internacionalmente respetada, colocada de forma estable en el primer cuartil de las revistas neumológicas del mundo, y que fuera considerada cada vez más como una primera opción de publicación de buenos estudios y no como una revista secundaria a la que acudir cuando otras revistas han rechazado los artículos.

Encaramos ya el verano de 2023, en el que se oficializará el factor impacto (FI) de 2022. Nos llegan noticias de la gran dificultad de Clarivate^® (empresa que emite los FI) por la gran sobrecarga de trabajo que ha supuesto (y sigue suponiendo) los miles y miles de artículos relacionado con COVID que les llegan, y sobre todo por los importantes cambios que esta empresa anuncia para este año (a veces de forma inesperada) como un mayor número de revistas con factor de impacto, cambios en el modo de indexación, mayor control de los fraudes editoriales y muchas más novedades aun por anunciar. Ello hace que este año más que nunca se haga muy difícil hacer previsiones sobre lo que ocurrirá en los próximos meses. Sin embargo, y a la vista de lo que viene observándose, es muy probable que un porcentaje importante de revistas (en especial las más dependientes de los artículos COVID, algunas de ellas neumológicas) bajen su FI (bajada que será más acusada el año que viene) y que las menos dependientes (entre las que esperamos estar) lo incrementen. Nuestro actual FI es 6.33 y nos situamos en el primer cuartil, por lo que nuestras previsiones son (salvo sorpresa no descartable) mantener este primer cuartil e incrementar el FI de forma significativa (siempre previsiones no oficiales hasta el momento).

Lo que sí podemos asegurar y cuantificar es que los objetivos descritos anteriormente están siendo cumplidos: Recibimos más que nunca estudios de calidad de grandes grupos internacionales y nacionales; hemos incrementado en un 33% los artículos por encargo (básicamente revisiones y editoriales) a mujeres investigadoras tanto nacionales como internacionales de gran nivel. Hemos atraído la atención de normativas de gran calado internacional que han sido publicadas en Archivos de Bronconeumología como GOLD, GINA o el Consenso internacional de sueño entre otros, sin olvidar las importantes normativas nacionales como las diferentes de GesEPOC, GEMA, derrame pleural, tromboembolismo pulmonar y las que quedan por llegar próximamente y hemos intentado dar voz de una forma amplia a todas las áreas de nuestra sociedad.

Finalmente, me hace mucha ilusión añadir que estamos a las puertas de que Open Respiratory Archives sea indexada en Pubmed Central. Su crecimiento ha sido importante, de tal forma que el Dr Felipe Villar ha pasado a ser el nuevo editor jefe de la revista para poder darle a la misma la independencia que precisa en vistas a la consecución (esperemos que pronto) de su FI particular.

En definitiva, acabamos este nuevo “curso” editorial satisfechos de nuestro trabajo, con muchos de los objetivos cumplidos, con la consciencia tranquila sobre nuestra justicia al valorar la calidad científica pero siendo conscientes de que por supuesto podemos cometer errores, y sobre todo agradecidos a la Junta Directiva por la total independencia que nos brinda sin la cual sería muy difícil trabajar, así como a todos los autores y revisores por sus excelentes trabajos y predisposición, sin los cuales no seríamos quienes somos.