En recuerdo y homenaje a Jaime Martínez González-Río
Queremos agradecer a los responsables de la revista el encargo de escribir un artículo en recuerdo y homenaje a Jaime Martínez González-Río recientemente fallecido. Y lo vamos a hacer un grupo de personas que nos consideramos amigos suyos y que además hemos tenido relación con él con respecto a su actividad en SEPAR. Cada uno de nosotros dará su visión acerca de los aspectos que considera destacados en la labor que el Dr. Martínez hizo por la Sociedad.
Pilar Bonany, nos refiere:
Jaime Martínez era un gran médico humanista y una excelente persona, educado, generoso, de trato afable, amigo de sus amigos y con un “sentimiento SEPAR” inquebrantable. Nos conocimos en el II Congreso SEPAR de Barcelona-Cap Sa Sal y desde entonces estuvimos unidos por el cariño, el respeto y la amistad.
Trabajador incansable y siempre a disposición de la Sociedad, de 1968 a 1994, ocupó diversos cargos directivos, participó en la elaboración de Normativas, Recomendaciones y Manuales de Procedimientos SEPAR, cursos de FMC, en la organización del Año SEPAR del Cáncer de Pulmón y en la del XXVII Congreso de Oviedo, que presidió.
En 1990, en la Asamblea General Ordinaria de Socios del Congreso SEPAR de Santa Cruz de Tenerife, fue elegido Presidente de la Sociedad.
Durante su mandato se consolidaron las Áreas de trabajo. El Congreso de Granada (1992) fue el primero declarado como “congreso limpio de humos”, impulsando la lucha antitabaco de la Sociedad. Propició las conversaciones con el Ministerio de Sanidad para la separación de las especialidades de pulmón y corazón, junto con el presidente de la Sociedad Española de Cardiología.
Pero también tuvo que hacer frente al desalojo de las oficinas que ocupaba la secretaria técnica cedidas por una industria farmacéutica que fue resuelto de manera eficaz permitiendo a la Sociedad tener una sede propia, gracias a la colaboración de Astra-Ifesa.
Jaime Martínez González del Río, amigo entrañable nos ha dejado. Con su marcha SEPAR queda huérfana de una presencia e influencia, siempre discreta pero sólida y permanente. Su recuerdo siempre estará en nuestra memoria.
Pedro Martín Escribano, nos transcribe el comentario sobre el período de presidencia de Jaime Martínez (1990-1992) realizado en el capítulo XV sobre “Los presidentes de la SEPAR”, del libro “Historia de la neumología y la cirugía torácica españolas “
Los primeros presidentes de SEPAR nos formamos, según nuestras personales iniciativas y posibilidades, autónomamente, en España o, más comúnmente fuera de ella, como bien podíamos. El Dr. Martínez González-Río fue el primer presidente cuya formación se hizo básicamente en nuestro país mediante un programa bien reglado de especialización en la Clínica de la Concepción, la Fundación Jiménez Díaz. Este hecho simboliza el cambio generacional que hace que la madura SEPAR, sea dirigida, a partir de esa fecha, por jóvenes con las energías necesarias para conseguir un rápido progreso de la Sociedad.
Un sorprendente exhorto de desalojo de los locales ocupados por la secretaría técnica de SEPAR, proceso debido posiblemente a un malentendido de sus titulares, fue enérgicamente solucionado por el presidente. Como tantas veces, un importante problema genera soluciones y, en este caso, la ayuda de otro laboratorio farmacéutico, habitualmente generoso con SEPAR, permitió tener un local propio, en el que, desde entonces, se han desarrollado todas sus actividades administrativas y científicas. Después de múltiples tanteos se consolidaron las Áreas de trabajo. El Congreso de Granada, bajo su presidencia, fue el primero declarado como “congreso libre de humos” y, en este sentido, con él se impulsó considerablemente la lucha antitabáquica de la Sociedad.
Víctor Sobradillo Peña y José Luis Viejo Bañuelos escriben un texto conjunto:
Recordar a Jaime siempre fue revivir situaciones en las que brillaba alguna de sus muchas cualidades. Hacerlo ahora es volver a valorar su entrega, generosidad, disponibilidad y dedicación. Es volver a sentir la pasión que ponía en todos los proyectos y el ánimo que infundía al resto de participantes en los mismos. Trabajar con él era sentir su aliento y fuerza constante. Y más cuando se trataba de labores relacionadas con SEPAR, una verdadera pasión en su vida.
Fueron muchas las actividades que realizó en SEPAR, todas ellas con una dedicación admirable y una cordialidad permanente. Después de múltiples trabajos presidiendo la sección de fisiopatología, la comisión antitabaco, el comité de congresos, el comité de oncología torácica, y la Vicepresidencia de la Sociedad (1983-1985) culminó con su período como Presidente de la Sociedad (1990-1992). Entre sus actividades siempre destacó su esfuerzo para luchar contra el hábito tabáquico, una constante presente en sus proyectos, que culminó con el primer Congreso SEPAR libre de humos, en Granada en 1992, bajo su mandato como Presidente.
Siendo Vicepresidente de SEPAR, el 14 de febrero de 1985, participó en la presentación del Libro Blanco de la Neumología Española al ministro de Sanidad Ernest Lluch donde además se habló de la convocatoria MIR en relación al escaso número de plazas para Neumología, de la definitiva separación de las plazas de Pulmón y Corazón y de la creación de Unidades de Neumología en todos los hospitales de la red pública. Con esta reunión se inició la colaboración del ministerio con las Sociedades Científicas más relevantes lo que llevó a la presencia de los miembros de SEPAR en las Comisiones Nacionales de la especialidad y en los tribunales para la provisión de plazas. Su presencia y sus comentarios en esta entrevista no pasaron desapercibidos.
Sería muy largo pararse a recordar tantos importantes y decisivos momentos en los que sus opiniones y su acción directa modificaron el panorama de la especialidad y contribuyeron a consolidar una Sociedad como SEPAR que actualmente disfruta del merecido prestigio, respeto y valoración científica. Cuando finalizó su período de presidente en el editorial de SeparVisión de 1992 se despedía de su cargo con estas palabras: “Ahora es vuestro deber hacer una crítica constructiva de este período para modificar, desarrollar, o concluir en el futuro inmediato los objetivos que no pude cumplir en estos dos años. Permitidme que sea optimista con respecto al futuro para que SEPAR continúe desarrollándose y mejorando en el cumplimiento de sus objetivos”
Por otra parte, el buen hacer de Jaime y su permanente disponibilidad, unidos a su sólida formación, le hicieron participar en múltiples proyectos, congresos, y conferencias. Su presencia se hizo imprescindible en muchos foros donde de nuevo se mostró de forma llamativa su generosidad y dedicación. Su labor docente y la formación de médicos residentes marcaron también su particular estilo, incorporando rápidamente a estudiantes y residentes al estudio de las enfermedades respiratorias de una forma responsable y amigable. Jaime supo rodearse de amigos en todos los lugares y se dedicó a cada una de sus tareas con intensa actividad, plena dedicación y gran eficacia. Su recuerdo permanece muy vivo en múltiples ámbitos y nos marca el camino a seguir. A pesar de su ausencia sigue enseñándonos el buen ejercicio de la medicina con dedicación, excelencia científica, y permanente cordialidad y discreción. Un recuerdo que permanecerá entre nosotros como lo estará el de su amistad y ejemplo.
Ángel López Encuentra, nos relata los siguientes recuerdos:
Cuando volvió de EEUU en 1972, Jaime se convirtió en el “médico adjunto especialista en Neumología” que me ayudó a entender la fisiopatología respiratoria en mi época de residente en la Fundación Jiménez Díaz. Desde entonces nos buscábamos en todas las reuniones de SEPAR, la ERS o la IASLC, de las que éramos socios para hablar de nuestras familias y proyectos.
Quiero aquí resaltar su criterio, actitud, rebeldía y ejecución real en su práctica clínica neumológica sobre la continuidad asistencial-emocional de los pacientes con Carcinoma Broncogénico (CB), y que creó escuela: asistencia desde la sospecha, el diagnóstico, la estadificación, la valoración funcional preoperatoria (en su caso), la quimioterapia en un hospital de día neumológico, el tratamiento de soporte. Esta actitud no siempre fue adecuadamente entendida; seguro que, en el futuro, la medicación – quimioterápica antineoplásica del CB podrá ser administrada por todos los neumólogos sin precisar de las unidades oncológicas de hospital de día, como parcialmente ya estábamos–estamos haciendo en los últimos años con la terapia dirigida a dianas moleculares. Sería lo adecuado y Jaime quedaría reivindicado.
José María García García recuerda:
Mi relación con Jaime y SEPAR fue en la organización del Congreso Nacional de Oviedo en 1994 en el que tuve el honor de ser Secretario bajo su presidencia, siendo Tesorero Miguel Ángel Cabezudo también fallecido recientemente. Fue una tarea que nos llevó mucho esfuerzo, Jaime como todos sabemos se involucraba al máximo en todo lo que se responsabilizaba. El Congreso de SEPAR tuvo por primera vez éxito económico y parte de los beneficios también sirvieron como capital inicial para la formación de la Sociedad Asturiana de Patología del Aparato Respiratorio (ASTURPAR).
Fui testigo de la atención constante que Jaime prestaba a SEPAR y cómo nos inculcaba a todos sus residentes la idea de pertenencia a la Sociedad, animándonos a hacernos socios desde que iniciábamos nuestro período de formación; labor fructífera pues consiguió involucrarnos y que muchos de nosotros desempeñásemos tareas activas en SEPAR.
María Jesús Fernández González, enfermera asturiana y que fue Coordinadora del Área de Enfermería, nos recuerda la influencia que el Dr. Martínez tuvo en la incorporación de este colectivo profesional en SEPAR, aspecto que hemos recogido en la carta “in memorian” que hemos publicado en el número de noviembre de Archivos de Bronconeumología. La aportación de Maria Jesús es la siguiente:
Como enfermera y miembro de SEPAR y ASTURPAR me adhiero, como no puede ser de otra manera a ese sentimiento y cúmulo de verdades que se dicen en el texto de Archivos de Bronconeumología y quiero recordar que fue un promotor e impulsor importante para la creación del Área de Enfermería de SEPAR en aquellos años que la separación de profesional médico y enfermería era muy evidente.
Y nos añade los siguientes datos: de 1990 a 1992 Jaime Martínez es presidente de SEPAR. Durante su mandato se consolidan las áreas de trabajo en SEPAR. Hay un grupo de técnicos enfermeros y fisioterapeutas que trabajan en Neumología y realizan trabajos de la especialidad; pero no están dentro de la Sociedad aunque hay voces favorables a que este grupo se integre. En el Congreso de Granada en 1992 siendo el Dr. Martínez Presidente de SEPAR, facilita que la Junta Directiva convoque una reunión con dicho grupo. En esta reunión se acuerda solicitar oficialmente la creación e integración en SEPAR del grupo de enfermería neumológica. En julio de ese mismo año la junta presidida por Jaime acuerda la creación del grupo y facilita que un laboratorio le de apoyo para que desde ese momento empiece a trabajar en el decálogo de la espirometría y la gasometría que se presentan en Sevilla en 1993. Es en noviembre de 1993 cuando se recibe la buena nueva; enfermeros de neumología se integran en la SEPAR. La culminación de ese trabajo y apoyo tuvo lugar en Oviedo como no podía ser de otra manera. Congreso SEPAR en Oviedo. Hotel de la Reconquista. Preside Jaime Martínez. Se elige el primer comité ejecutivo del Área de Enfermería. Se presentaron 12 comunicaciones y pósters entre ellas dos comunicaciones de enfermería de fisiología respiratoria. Fue nuestro debut con transparencias, empujadas al escenario por el Dr. Payo. En el libro de “Historia de la neumología y la cirugía torácica españolas” aparecen muchos de estos datos.
Gracias Dr. Martínez.
En fin, esperamos que con estos testimonios podamos dar una imagen de lo que Jaime Martínez González-Río ha aportado a nuestra Sociedad. No nos cabe duda de que ha sido una persona destacada en todos los sentidos. Y decir que nos ha dejado muchas cosas y sentimientos que son imposibles de transmitir por medio de palabras.
Jaime un abrazo, siempre.
Fotos cedidas por el Dr. José Luis Viejo
Figura 1. Jaime Martínez, Presidente de la SEPAR. Octubre 1990.
Figura 2. Reunión en el MinisteRío de Sanidad. 14 febrero 1985. Drs. Viejo Bañuelos, Ramos Seisdedos, Martínez González-Río, Martín Escribano y Sr. ErnestLluch