Jorge Freixinet, un hombre tranquilo y afortunado
¿Abogado? Sí, dice que “es más de letras que de ciencias”. Y es cirujano torácico. No en este orden. Y ha sido médico de cabecera y médico rural, también. Socio de SEPAR desde 1983, desde que empezó la residencia en el Hospital Clínic de Barcelona. Eligió Cirugía Torácica porque era una “cirugía muy cirugía”. Hoy es Jefe del Servicio de Cirugía Torácica del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín, Catedrático de Cirugía de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y, desde 2010 hasta 2016 fue Jefe del departamento de Ciencias Médicas y Quirúrgicas de esta Universidad. Dice que cuando aterrizó en Gran Canaria “todos los astros se alinearon a su favor”. Es leridano de nacimiento, aunque estudió en Barcelona y ha desarrollado su carrera profesional íntegramente en Gran Canaria y siempre ha estado fuertemente ligado a SEPAR. Su vida en Gran Canaria desencadenó también que iniciara una presencia muy activa en SEPAR. Ha sido vocal en varias Áreas, entre ellas del Comité de Relaciones Institucionales, ha formado parte del Comité de Congresos, durante muchos años y en varios periodos ha trabajado en el Comité Científico y también ha sido, en multitud de ocasiones, revisor de Archivos de Bronconeumología y de becas SEPAR. Fue Vicepresidente del 35 Congreso de Maspalomas en 2002 y Presidente del 48 Congreso de Gran Canaria en 2015. Pero la guinda a este recorrido fue el ser elegido y desempeñar el cargo como Vicepresidente Cirujano Torácico durante la presidencia del Dr. Julio Ancochea, compartiendo Junta de Gobierno con “su compañero en el Dr. Negrín”, el Dr. Felipe Rodríguez de Castro como Vicepresidente Neumólogo. No deja de sonreír y me dice, más de una vez, que se considera un hombre muy afortunado.
A unos 2.500 kilómetros…
Estoy muy a gusto. Fue una casualidad. Después de la residencia me quedé en el Hospital Clínic, terminé mi tesis doctoral y,a principios de año 1989, “hubo una llamada” para saber si alguien estaba interesado en trabajar en las Palmas. Me presenté rápidamente. Salieron plazas de Médico Especialista en 1990 y rápidamente me consolidé en una plaza fija. A los pocos años, en 1995, ya era Jefe de Servicio. Empecé también enseguida como Profesor Asociado en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Fui el primer cirujano torácico en serlo. La Universidad se había fundado en 1990.
¿La Cirugía Torácica ha cambiado mucho desde entonces?
Desde los años 90, con la cirugía mínimamente invasiva, todas las especialidades quirúrgicas se han revolucionado y también la Cirugía Torácica. Hasta entonces, solo hacíamos la clásica toracoscopia que data del lejano 1911. Con el “vídeo”, la revolución ha sido tremenda. Ha sido uno de los grandes motores del cambio. Una lástima es que en Canarias, intentamos con Andrés Varela implantar el trasplante pulmonar pero se nos dijo que no había suficientes pacientes en las islas. Luego, Varela fue uno de los pioneros en esta técnica en España, en el Hospital Universitario Puerta de Hierro de Madrid.
Pero hemos ido un poco más allá del vídeo…
Ahora se está implantando la tecnología en 3D y la cirugía robótica. Son el presente. El problema es disponer del presupuesto suficiente para implantar estas tecnologías. La Cirugía Torácica avanza porque la tecnología le proporciona mejores resultados y conocimiento. Cuando yo empecé, la Cirugía Torácica era muy primitiva. Mis maestros, entre ellos el Profesor Sánchez-Lloret estaban formados como cirujanos generalistas y operaban todo tipo de cirugía y lo hacían bien. La especialización llegó posteriormente.
¿Hacia dónde vamos?
A la superespecialización. La tendencia es que las especialidades médicas se enfoquen a la superespecialización debido a que la investigación avanza más y más rápidamente. Anteriormente a los años 70, el cirujano era un médico valiente que se enfrentaba a lo que se encontraba y avanzábamos, sí, pero despacio y en ocasiones a costa de hacer lo que se podía.
SEPAR y la Cirugía Torácica ¿todo bien?
Todo bien. Vivimos momentos difíciles con la creación de la SECT, pero creo que en estos momentos estamos en paz. En SEPAR estamos muy integrados y “nos aprovechamos mucho y nos aprovechan mucho”, tal y como debe ser. Cuando se fundó SEPAR, los neumólogos y los tisiólogos desarrollaban su “especialidad” en unos límites menos claros, porque, en ocasiones empleaban técnicas invasivas y operaban. Podríamos decir que la Cirugía Torácica nació a mediados de los 70 y fue aceptada oficialmente como especialidad formal en el 78, aunque ya contaba con un corpus de conocimiento y de procedimientos quirúrgicos. Ahora somos cirujanos torácicos y neumólogos de forma bien definida. Nosotros nos adaptaremos a la Sociedad y SEPAR también lo hará, como ha sido siempre.
¿Ya hay más cirujanas que cirujanos?
No es un hecho opinable. En las Facultadesde Medicina, el 75% del alumnado es femenino. En mi Servicio en el Hospital, en la actualidad,somos solo dos hombres. En cambio, cuando yo era médico residente,solo tenía una compañera cirujana torácica en toda España. La Medicina se feminiza.
Buenos y malos recuerdos…
Mi memoria es muy selectiva, me cuesta recordar malos momentos. En cambio, como muy bueno, recuerdo con mucho cariño cuando en el Congreso de Sevilla me eligieron Vicepresidente Cirujano Torácico de SEPAR. Me vienen a la memoria muchas reuniones con Julio Ancochea en el desarrollo del Plan Estratégico. Preparábamos las reuniones en el avión, con Felipe Rodríguez de Castro.
¿Futuro?
SEPAR es imprescindible, mantiene valores muy importantes para la especialidad de Cirugía Torácica.Tiene una muy buena cantera de médicos jóvenes que la sabrán empujar y la harán avanzar afianzando la investigación y la formación: el progreso del conocimiento científico es lo más importante.