Dr. Àlvar Agustí, Pensar juntos para construir el futuro
Creó la primera página web de la ERS (European Respiratory Society) y ha formado parte de su Junta Directiva, ha sido editor asociado de la ERJ (European Respiratory Journal) y del American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine. Ideó los Programas de Investigación Integrados de SEPAR como Director del Comité Científico “pensado juntos” con los doctores Pozo (Madrid), Roca (Barcelona), Rodríguez de Castro (Canarias) y Salvatierra (Córdoba). Ha sido director de la Red Respira del Instituto Carlos III y del CIBER de Enfermedades Respiratorias (CIBERES). Este año 2018 se cumplen veinte años desde que el entonces presidente de SEPAR, el Dr. Víctor Sobradillo, le pidiera que aceptase ser el director del Comité Científico. En aquel 1998, igualmente, se cumplían veinte años que el padre del Dr. Agustí, el Dr. Agustí-Vidal, presidente de SEPAR; propusiera al Dr. Sobradillo ser director del Comité Científico. Una casualidad mágica. Me dice el Dr. Agustí que es básico distinguir entre investigación e innovación y me lo explica: “en la investigación el input son euros y el output es conocimiento, en la innovación el input es conocimiento y el output euros”. Y acota: “el beneficio para el paciente está en la innovación. El valor y la sostenibilidad del sistema se hallan en la cadena de valor que une investigación e innovación”; y me convence de pleno.
¿Qué es un líder y cómo se lidera?
A bote pronto: creo que un líder es alguien que inspira confianza.
Pero ¿esto cómo se hace?
Hay que considerar varios aspectos. El primero es el contenido de su discurso: que lo que te diga te guste. Pero solo el discurso no sirve. El segundo es la credibilidad del líder. Que lo que dice lo haya llevado a la práctica, que lo que dice lo practique, que lo que dice y lo que hace esté alineado. En tercer lugar, la empatía, que sea cercano, la capacidad de transmitir y conectar con el otro y, por lo tanto, trabajar en equipo: once “Messi’s” no ganan un partido, se necesitan otros diez jugadores (portero, defensa, medio, otros delanteros)
¿Y esto de puede aprender?
Creo que, como todo en la vida, se puede aprender, si bien es cierto que hay personas que tienen capacidades innatas. Seguramente es un cóctel de capacidades innatas y capacidad de aprendizaje. Incluso de aprender de la propia experiencia con humildad.
¿La neumología española está bien liderada?
La neumología española tradicionalmente ha sido muy buena y sigue siendo muy buena. Se puede ir a la literatura para constatarlo. Hace ya quince años, la revista Thorax aseguraba que la investigación en neumología en España estaba en un puesto privilegiado, en infecciones respiratorias, en asma, en EPOC, en sueño. En cada una de estas áreas hay investigadores españoles de máximo nivel en ámbito internacional. Ahora bien, ¿continuará siendo puntera? Yo creo que sí. Yo soy optimista. Pero no está garantizado. Este es un proceso activo que necesita muchas de las herramientas que SEPAR ya tiene desplegadas: Los PIIs, por ejemplo. Me hace particularmente feliz ver que, veinte años después de su creación, los PIIs no solo continúan sino que mejoran y crecen. En el momento que nacieron no todos los veían claro, como es natural. Que esta cultura de cooperación hoy perviva en SEPAR es muy positivo. Cuando nacieron lo PIIs no existía lo digital: ni Internet, ni las redes sociales, ni el big data… El futuro no existe, hay que escribirlo.
¿Cómo lo escribimos?
Hay que animar a los socios más jóvenes de SEPAR porque el futuro depende de ellos. Pronto saldrá publicado en Archivos de Bronconeumología el resumen de la conferencia Manuel Tapia del Congreso de palma de este año: la escribí con mucho cariño para ellos: son diez consejos sobre cómo hacer camino…
Y… ¿cuál es la historia de la creación de los PIIs?
En 1998, el presidente de SEPAR, Víctor Sobradillo, me ofreció ser el director del Comité Científico. Acudí a tres personas para que se incorporasen al comité: Los doctores Pozo (Madrid) Roca (Barcelona), Salvatierra (Córdoba) y Rodríguez de Castro (Canarias) para “pensar juntos”. De estos encuentros surgió el Centro Respira de Investigación (CRI; que ya no existe) que después se materializo en la creación de los PIIs. Cada PII tenía que disponer de cuatro líneas de actuación sobre un tema determinado de interés: investigación básica, clínica, epidemiológica y transferencia de conocimiento. Creo que los PIIs todavía perviven porque han demostrado ser una buena herramienta de investigación cooperativa.
Hay una buena red de investigación en neumología en España…
Creo que sí, y se inicio con los PIIs. El Instituto Carlos III lanzó una primera convocatoria de Redes Temáticas de Investigación Cooperativa (RTICs), que eran muy parecidas a los PIIs, lo que facilitó que SEPAR se pudiese presentar a la convocatoria (y ganarla; Red Respira) sobre la base de los PIIs. Unos años después, el ISCiii evolucionó algunas RTICs que se convirtieron en los Centros de Investigación Cooperativa en Red (CIBER), con lo que la Red Respira se convirtió en el CIBER de Enfermedades Respiratorias (CIBERES). Si miro hacia atrás me siento orgulloso de las estructuras de investigación cooperativa que creamos entre todos.
¿Cuál es ahora el reto para los jóvenes investigadores?
Dicen que “hacer predicciones es muy difícil, sobre todo si es sobre el futuro”. Yo terminé la carrera en año 1979 ¿qué ha pasado en estos cuarenta años? Ordenadores, Internet, endoscopia, los inhaladores, las UCIs, los tratamientos biológicos… muchas cosas. ¿Alguien se lo imaginaba? No podemos ser vanidosos: el futuro no se puede predecir, pero sí se puede construir. ¿Qué pasará? Depende de lo que hagamos. ¿Qué se espera? Creo que el futuro de la medicina es femenino, el trabajo dependerá necesariamente de equipos multidisciplinarios, debemos actuar antes (llegamos tarde a la mayoría de enfermedades crónicas) … y ganará quien sepa dónde encontrar la información exacta que precisa.
¿Qué camino debe emprender la neumología?
Debe tecnificarse, como la cardiología. Yo todavía voy a la consulta con el mismo fonendo que llevaba hace treinta años a decir “respire hondo”. No puede ser. Es cierto que tenemos la endoscopia, fármacos biológicos, la tecnología en el área del sueño… tenemos que actualizarnos. Tendríamos que “pensar juntos” y revisar todo lo que concierne a la imagen, por ejemplo. Antes había auténticos expertos mundiales en interpretación de placas de tórax. Ahora haces un TAC, y fuera. Tenemos que ser creativos para aprovechar la tecnología actual para mejorar la práctica clínica.
El mejor recuerdo de SEPAR…
Fue en el año 1997. Yo era el presidente del Congreso Nacional de SEPAR que aquel año se celebraba en Palma de Mallorca. La Junta de Gobierno aprobó ofrecer la medalla de oro de SEPAR a todos nuestros ex presidentes. ¡Yo tuve el honor de galardonar a mi padre!
La peor experiencia…
Cuando me desperté en la UCI y mi esposa me dijo que llevaba un mes allí. ¡Nunca entiendes que algo así te pueda pasar! Aprendí la lección más importante de mi vida: la felicidad no es un sentimiento, es una decisión. Este año SEPAR me ha invitado a pronunciar la conferencia Manuel Tapia, Lilly me ha distinguido con un premio a la trayectoria de investigación, y hace pocos días la ERS me ha nombrado miembro de honor de la sociedad. Me pregunto si me están despidiendo!. Por supuesto, me gustaría seguir investigando pero, sobre todo, ejercer de mentor y ayudar a los jóvenes a desarrollar sus propias carreras en la medicina académica respiratoria internacional.